Lidiar con la mielopatía puede ser una experiencia difícil y angustiante, ya que afecta la médula espinal y puede provocar síntomas físicos y neurológicos significativos. En SpineCare of NY, comprendemos las complejidades de esta afección y nos dedicamos a brindar atención compasiva adaptada a las necesidades únicas de cada paciente.
¿Qué es la mielopatía?
La mielopatía es una lesión de la médula espinal causada por una compresión severa. Esta afección puede provocar diversos déficits neurológicos que pueden dificultar significativamente la realización de las tareas cotidianas, afectando así la calidad de vida. Cualquier persona puede desarrollar mielopatía, pero es más común en personas mayores de 55 años, ya que su principal causa es la degeneración discal relacionada con la edad. Existen principalmente dos tipos de mielopatía: cervical y torácica. La mielopatía cervical se presenta en el cuello, mientras que la torácica se presenta en la parte superior y media de la espalda.
¿Qué causa la mielopatía?
La mielopatía es una afección neurológica grave que se origina a partir de una lesión en la médula espinal. La mielopatía puede desarrollarse como resultado de una lesión en la médula espinal, una enfermedad degenerativa del disco o cualquier catalizador que comprima la médula espinal. Las causas comunes pueden incluir:
- Discos herniados: los discos que se abultan o se rompen pueden presionar la médula espinal y provocar daños o lesiones.
- Estenosis espinal: Condición que se caracteriza por el estrechamiento del canal espinal que puede comprimir la médula espinal.
- Enfermedad degenerativa del disco: a medida que envejecemos, nuestros discos espinales pueden cambiar y desgastarse, lo que afecta la función de la médula espinal.
- Traumatismo: Las lesiones en la columna vertebral, como fracturas o dislocaciones, pueden dañar la médula espinal.
- Tumores: Los crecimientos anormales en la médula espinal o alrededor de ella pueden causar compresión.
- Infecciones: Afecciones como abscesos epidurales o discitis pueden provocar inflamación y daños en la médula espinal.
Síntomas de la mielopatía
Los síntomas de la mielopatía pueden depender de qué parte de la columna vertebral esté afectada, ya que cada zona contiene diferentes nervios que controlan distintas partes del cuerpo. Los síntomas comunes pueden incluir:
- Dolor en el cuello o la espalda.
- Hormigueo, entumecimiento o debilidad en brazos, manos, piernas o pies.
- Dificultad con la motricidad fina.
- Problemas de equilibrio o coordinación.
- Cambios en los reflejos en las extremidades.
- Pérdida del control de la vejiga o los intestinos.
¿Cómo se diagnostica la mielopatía?
En SpineCare of NY, la mielopatía se diagnostica mediante una combinación de métodos de diagnóstico integrales. Dado que la mielopatía comparte síntomas con otras afecciones comunes de la columna vertebral, se requiere un examen exhaustivo para diagnosticarla con precisión. Esto comenzará con una revisión de su historial médico y de cualquier lesión previa. Se realizará un examen físico para evaluar la función neurológica y localizar el dolor. Se utilizan pruebas de imagen, como resonancias magnéticas o tomografías computarizadas, para visualizar la médula espinal e identificar cualquier compresión, degeneración o anomalía estructural que cause síntomas. Se pueden realizar pruebas adicionales, como radiografías, para evaluar la alineación de la columna.
¿Cómo se trata la mielopatía?
El tratamiento de la mielopatía depende de su gravedad y de la causa subyacente, pero generalmente incluye opciones quirúrgicas y no quirúrgicas. Los tratamientos no quirúrgicos pueden incluir fisioterapia para fortalecer los músculos, mejorar la flexibilidad y aliviar la presión sobre la médula espinal. Los medicamentos como analgésicos y antiinflamatorios pueden ayudar a controlar los síntomas. En los casos más graves o cuando los métodos no quirúrgicos son insuficientes, puede ser necesaria una intervención quirúrgica. Esto podría incluir procedimientos como la cirugía de descompresión microquirúrgica para aliviar la presión sobre la médula espinal o la fusión espinal para estabilizar la columna. El objetivo del tratamiento en SpineCare of NY es aliviar los síntomas, prevenir un mayor daño neurológico y mejorar la función general la primera vez utilizando un enfoque mínimamente invasivo.
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